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Identidad

Cómo es experimentar una orgía en realidad virtual

Si creías que las orgías reales no te ponían los pelos suficientemente de punta, intenta aguantar el visionado de una película de sexo tántrico en realidad virtual.
All photos via "Viens!"

"Coloca los pies sobre el suelo. No sujetes los auriculares. Y respira". Me dicen que la experiencia solo durará 12 minutos. Pero 12 minutos son mucho tiempo en medio de una orgía de realidad virtual.

¿Adónde miro? Cada vez que muevo la cabeza, juguetones cuerpos desnudos aparecen de pronto saliendo de una nube blanca de espacio abstracto. Me miran directamente y están todos follando. Mi sillón giratorio me va balanceando de un lado a otro y dentro de los auriculares el mundo se vuelve lentamente del revés. Ahora tengo cuerpos por encima y por debajo de mí. Todos me sonríen. Yo mantengo las manos quietas. Intento respirar. Intento que mi cara tenga una neutra expresión de apreciación artística por si alguien me está mirando. Doce minutos son mucho tiempo…

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Esta es mi primera experiencia sexual en RV: una orgía real filmada en 360 grados está teniendo lugar a mi alrededor en un mundo virtual y yo estoy justo en medio. Podría decirse que estoy siendo muy egoísta, porque soy la única aquí que recibe y no da nada. Puedo mirar, pero no puedo tocar a nadie excepto a mí misma. Supongo que un almacén situado en South Tottenham, Londres, rodeada por un montón de extraños un martes por la tarde no es el momento ni el lugar para hacerlo. ¿Soy una voyeur? ¿Me siento empoderada? ¿Cuáles son las putas normas?

"No hagas el gilipollas. Así de sencillo", me dice sonriendo Carl Guyenette, el hombre que me ha conducido hasta esta madriguera sexual. Las rastas naranjas de Guyenette flotan en torno a su sonriente cara, surcada de piercings. También es cofundador y técnico creativo de SpheresVR y el creativo tras la película de RV Viens! ("¡Córrete!", en francés) que estoy experimentando ahora mismo.

No te dejes engañar por sus rastas, Guyenette ha sido descrito recientemente como un "técnico creativo brillante y futurista" y nombrado persona de interés por los fundadores del Foro Mundial de RV, donde fue invitado a ofrecer el discurso de clausura este año. Ofreció su charla sobre el papel de la RV en la conciencia humana del futuro mientras llevaba un mono con estampado multicolor de leopardo. Este año, sus películas han llegado a la sección oficial tanto en Sundance como en Cannes. Refuge, su reciente obra periodística en 360 grados grabada en Lesbos sobre la actual crisis de refugiados, es abrumadoramente potente.

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También tiene los ojos firmemente entrenados en las radicales posibilidades de la realidad virtual, aunque decir esto haga que parezca un personaje sacado de una novela de William Gibson. "Tenemos que empezar a hablar sobre cómo será la realidad cuando no estemos limitados por nuestra forma humana", me dice. "Con la RV social estamos entrando de forma efectiva en el metaespacio mental. Podremos viajar al interior de la mente de alguien del mismo modo que si viajáramos por el interior de su dormitorio en su casa. El Tinder con holoportación será una realidad que sucederá en el próximo par de años.

Dirigida por el cineasta de RV Michel Reilhac y rodada por Guyenette, Viens! precisó 14 cámaras, grabación de sonido envolvente ambisónico y varias personas teniendo sexo tántrico en un soleado almacén de París el año pasado. Pero no es una película porno. Como explicó Reilhac en Cannes, donde fue oficialmente seleccionada para el primer pabellón de RV del festival de cine, es un experimento cuya finalidad es transformar y "poner a prueba las barreras de la intimidad, la presencia y la empatía".

Entonces, ¿me siento transformada? Innegablemente se trata de una experiencia muy sexual y definitivamente no es como ver una película porno, pero es que las películas en RV tampoco son películas. No hay ninguna narrativa, ningún guión. No es como ver una película en surround. Si se hace bien, el cerebro en realidad lo interpreta como una experiencia real, tanto a nivel físico como emocional.

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La Dra. Slyvia Xueni Pan, catedrática en ingeniería informática en Goldsmiths, explicó en el reciente Foro sobre Futuros Virtuales que la RV crea tanto una situación como una ilusión de plausibilidad dentro del cerebro humano. La situación en tiempo real, la pantalla estéreo en 3D y el campo total de visión convencen a tu cerebro de que realmente estás ahí. "Si las situaciones y los acontecimientos que suceden en la RV se corresponden con tus acciones y puedes identificarte personalmente con ellos", dijo durante su charla, "reaccionas ante esos acontecimientos como si fueran reales".

Como las ninfas sexuales de Viens! fueron filmadas para que me miraran directamente, mi cerebro cree que no solo estoy viendo una orgía, sino que estoy participando en ella, aunque sin poder tocar a nadie. Sus sonrisas desencadenan una impresión positiva automática en mi cerebro. Por eso, a pesar de intentar poner cara de póquer, no puedo evitar devolverles la sonrisa.

La segunda secuela de la ilusión de plausibilidad es que mi cerebro se dispone a almacenar todo esto en su banco de recuerdos reales. Es decir, que la próxima vez que esté en una orgía de verdad contaré con un montón de "experiencia" que me ayude a manejar la situación. No solo tiene un gran potencial para el aprendizaje rápido, sino que también abre una puerta a todo un nuevo mundo para el sexo experimental. "Sea cual sea tu preferencia o tu fetiche, hay toda una forma nueva de experimentarlos", explica Guyenette con una sonrisa. "La realidad se convierte en lo que tú percibas que es. La RV es una historia espacial y temporal, que se basa en cambiar nuestra percepción, en poner cosas en duda… Somos pioneros en el campo de la conciencia".

¿Es este el futuro del sexo? Ni siquiera me he quitado la ropa. Un enorme problema —tanto para mí como para todo el resto del mundo, o eso me han asegurado— es la angustia que produce la incapacidad de separar el sexo del vínculo afectivo, o la lujuria del amor. Durante el sexo y durante el acurrucamiento postcoital, el cerebro libera una sustancia química llamada oxitocina que te hace sentir feliz, amada y vinculada a la persona que tienes entre tus brazos.

Mi madre me advirtió acerca de quedarme embarazada, pero recibí menos consejos sobre las relaciones fantasmales. El sexo virtual nos permitiría ahorrarnos la mañana siguiente, cuando el impulso del vínculo emocional se desmorona sobre el espacio vacío que hay a tu lado.

¿La intimidad virtual es más empoderadora para las mujeres, más emocionalmente segura? Películas como Viens! hackean activamente tu cerebro y te llevan a través de un genuino viaje sexual sin que tengas siquiera que abandonar tu silla de escritorio. Y sin el peligro de quedarte embarazada. El sexo, la realidad, la vida… todo está a punto de pasar al siguiente nivel, así que abróchate el cinturón y disfruta. Como dice Guyenette, "Aquí tienes tu ticket. Solo tienes un viaje. Intenta no hacer daño a nadie. Anda, ve".