El grupo de Facebook en el que las rusohablantes de España se ayudan entre ellas

Se llama Devochki v Ispanii: Chicas en España.

En este grupo no-mixto hay de todo: mujeres eslavas de Rusia, Ucrania o Moldavia, junto a ciudadanas de repúblicas exsoviéticas; armenias, uzbekas o azerbayaníes. Una puede encontrar jóvenes mochileras que tienen intención de pasar unos días en la península, chicas casadas con españoles y alguna que otra solicitante de asilo. Ya son casi 12.000.

En Broadly hablamos con Genya Petrova, su fundadora: una exagente inmobiliaria y hoy enfrente de un restaurante barcelonés de comida rusa.

"Antes trabajaba en el sector inmobiliario y muchas clientas, cuando venían, se encontraban solas: sólo me conocían a mí. Constantemente tenían dudas y preguntas, e incluso no tenían con quién salir a cenar", recuerda Petrova.

Anteriormente a abrir el grupo, Genya creó una web tipo dating sólo para chicas: Podruzhka.es, con filtros de edad, ciudad e intereses, hoy cerrada. Para ella Facebook empezó siendo tan solo una herramienta de promoción de su aplicación.

La difundió en varias páginas rusohablantes hasta que, por indicación de una conocida en Facebook que acababa de llegar a Alicante, ahora coadministradora, creó la página hace unos dos años.

El grupo tiene sus propias normas para que las conversaciones no se vayan de madre: está prohibido hablar de política, conflictos nacionales, cuestiones de raza u orientación sexual o religiosas. Cuando se creó esta herramienta ya había estallado el conflicto ruso-ucraniano. Genya recuerda lo mucho que le costó poner orden entonces.

Pero no sólo hay peleas por politiqueo. La curiosidad de una de las usuarias por la vida sexual de sus compatriotas desencadenó, una vez, una tremenda discusión sobre la conveniencia de airear este tipo de intimidades. En estos supuestos, cuando se escribe en mayúsculas STOP: FIN DE LA DISCUSIÓN, se acabó lo que se daba. Quienes escriban después del tajante aviso son expulsadas sin piedad.

Los insultos o espamear en demasía también causan baja, aunque hay un cierto margen para la venta de enseres, vestidos o productos varios. También para los regalos: ropa usada o hasta mascotas a las que una no puede cuidar por irse a vivir a otro país. Un anuncio al mes para evitar que el mercadeo entierre cuestiones más importantes, como las dudas sobre cómo regularizar la situación de aquellas que aún no disponen de residencia legal.

Existe una sección pensada a este efecto: bajo la fotografía llamada "papeles legales" las usuarias pueden dejar documentación útil para sus compañeras de penurias bajo la estricta ley de extranjería española.

Una posible estrategia es la búsqueda de marido. Algunas presentan a sus amigos españoles, con la foto de rigor, y, aquellas que muestran interés, solicitan su contacto en los comentarios. Aunque nadie pone en duda que de ahí surja el amor verdadero…

Y he aquí la gran pregunta que las iniciadoras de un grupo no-mixto han de enfrentar siempre en algún momento: ¿Por qué sólo mujeres?

Genya apela a las raíces ancestrales de su cultura: cuando las amigas se reunían a altas horas de la madrugada para charlas de sus cosas. Un poco como la rebelión sigilosa de Langle de Paz.

En el grupo, asegura ella, las mujeres hablan sin tapujos, "y no se cortan por la presencia de los hombres". De acuerdo a los datos aportados por la página, cada semana una media de medio centenar de nuevas usuarias solicitan acceso al grupo. Últimamente también muchos hombres, pero a ellos, como a los perfiles comerciales que vienen a venderte la moto, los tienen a raya.