El verano español llegó con número récord de drogas y fiestas ilegales

La policía de la isla española de Mallorca realizó su mayor operativo antinarcóticos a raíz del aumento de las fiestas ilegales que se celebran en las Baleares.

Durante el operativo del miércoles 4 de agosto en Palma de Mallorca, la capital de Mallorca, la policía encontró más de 21.000 pastillas de éxtasis, 3,5 kilos de speed, 3,5 kilos de fragmentos de ketamina, dos kilos de "cocaína rosa" o 2C-B, más de un kilo de ketamina en polvo, junto con hachís y cinco kilos de sustancias de corte y adulteración.

La policía arrestó a dos españoles vinculados con la droga incautada, cuyo valor supera los 850,000 euros. Uno de los detenidos al parecer es un DJ muy conocido en Ibiza, una de las tres principales islas Baleares frente a la costa este de España.

Las pastillas de éxtasis confiscadas se conocen localmente como “Fanta naranja” y se vendían por 20 euros cada una. La policía sabía que se vendían en las fiestas ilegales y las redes sociales tanto de Mallorca como Ibiza. La redada se produjo después de que un miembro de la comunidad encontrara una caja de zapatos repleta de miles de píldoras en la ciudad industrial de Manacor, pues las indagaciones correspondiente llevaron a los investigadores a encontrar el lucrativo botín.

La policía de las famosas islas españolas, que suelen estar repletas de turistas europeos, ha notado un aumento en las fiestas privadas ilegales en Ibiza y Mallorca desde que los grandes clubes, como Amnesia y Pacha, fueron cerrados debido a las restricciones por la pandemia. También ha habido un aumento de las fiestas callejeras al aire libre y las fiestas en las villas, las cuales son promovidas en las redes sociales. A medida que los casos de COVID aumentan, la policía de Ibiza presuntamente recluta a "detectives" extranjeros para infiltrarse en estos eventos ilegales y reportarlos a la policía.

VICE World News habló con un traficante de drogas colombiano que radica en Ibiza, a través de una SIM Omerta encriptada, sobre cómo el COVID continúa cambiando el mercado local de drogas. Dijo que a pesar del cierre de los clubes, la demanda de drogas en las islas no se ha visto afectada.

“Todo empezaba a sentirse normal hasta que los clubes volvieron a cerrar hace un par de semanas. En el caso de la [cocaína] blanca, todo sigue igual. La venta de la blanca siempre se mantiene estable, por lo que una caja [kilo] nos da entre 34,000 y 38,000 euros, dependiendo del nivel de esfuerzo involucrado. Mucha de la cocaína se consume en las villas y los eventos de alto nivel, por lo que las personas que asisten a estos lugares, por supuesto, no se ven muy afectadas por las restricciones a causa del COVID".

Dijo que debido a las restricciones por COVID de la temporada navideña, ha habido menos efectivo del habitual en las islas para importar las típicas drogas de club nocturno, como la MDMA y la ketamina.

“El confinamiento arruinó el verano pasado para los empleados de los clubes y bares: los lugares más grandes estuvieron abiertos, en el mejor de los casos, durante un mes, por lo que hay menos efectivo disponible para hacer la inversión inicial necesaria para traer bienes [drogas] a la isla. Esto significó que al comienzo de este verano los dealers tuvieran que hacer importaciones bastante pequeñas de ketamina y MDMA, de solo un par de kilos o unas mil píldoras, para aumentar el flujo de efectivo nuevamente”.

El tráfico de drogas en España no muestra signos de descenso tras el confinamiento. En enero, la policía española realizó la mayor incautación de drogas sintéticas de su historia al descubrir 827.000 pastillas de éxtasis, 76 kilos de speed, 39,5 kilogramos de fragmentos de ketamina, 217 litros de anfetamina líquida, 310 kilogramos de hachís, 89 kilogramos de marihuana, 2.000 dosis de LSD y 1,65 kilogramos de cocaína rosa, y se dice que gran parte de ello tenía como destino Ibiza y Mallorca.

En mayo, la policía desmanteló tres bandas criminales al arrestar a 14 personas por traficar diez kilos de cocaína de alta pureza y cinco kilos de hachís. Mientras que en septiembre del año pasado, arrestaron a 16 personas en una serie de operativos sorpresivos de alto perfil, con ello también fue desmantelado un grupo criminal que presuntamente era responsable de proveer cocaína, speed y éxtasis a la mayoría de los narcomenudistas de Mallorca.

Además, el verano pasado, un DJ de la escena de los clubes de Ibiza, Hugo Bianco, fue arrestado después de que se sospechara que era una pieza importante de una red internacional de tráfico de drogas que, a lo largo de tres años, suministró dos millones de pastillas de éxtasis y grandes cantidades de ketamina a quienes asistían a los clubes de San Antonio, Playa d'en Bossa y la ciudad de Ibiza.