La industria del porno se deshace de James Deen como si fuera un condón usado

Este artículo se publicó originalmente en Broadly, nuestra plataforma dedicada a las mujeres.

La industria del porno va a deshacerse de James Deen como si fuera un condón usado. En tan solo 72 horas, desde que las actrices Stoya, Tori Lux, y Ashley Fires acusaran a Deen de agresión sexual, el fabricante de juguetes sexuales Doc Johnson ha retirado su línea porno James Deen, y varias compañías de producción —incluidas Evil Angel, Doc Johnson y Wood Rockett— han declarado públicamente que no volverán a trabajar con él.

"Nos hemos tomado muy en serio las acusaciones contra Deen", afirma Chad Braverman, jefe de operaciones y director creativo de Doc Johnson. "Y en vista de las últimas acusaciones, hemos decidido no continuar trabajando con los productos que fabricamos bajo su nombre".

Las compañías pornográficas han roto los vínculos con Deen más rápido de lo que Hollywood reaccionó a las acusaciones de violación contra el comediante Bill Cosby. Los grandes medios, incluida la revista People, publicaron las acusaciones contra Cosby ya a principios de 2006. Sin embargo, estas acusaciones no cobraron importancia mediática real sino hasta el año pasado, cuando el cómico Hannibal Buress llamó "violador" a Bill Cosby en uno de sus monólogos en Filadefia. Varias páginas web empezaron a hacerle eco al comentario de Buress el 17 de octubre de 2015, pero la NBCUniversal de Comcast esperó hasta el 19 de noviembre de 2015 ―más de un mes después― para cancelar la nueva sitcom de Cosby.

"En Hollywood, hay gente que probablemente hace cosas peores, pero siguen trabajando con ellos", dice Reign. "Yo no puedo trabajar con alguien si cabe la más mínima posibilidad de que haya cometido una violación".

Reign ha participado en varios videos con Deen. El trabajo de esta estrella porno a menudo ha incluido escenas de sexo violento, pero las compañías pornográficas entienden bien que hay una gran diferencia entre violación y una actuación de sexo agresivo. Para explicar la decisión de Evil Angel de cancelar el rodaje de futuras escenas con Deen, el presidente y fundador de Evil Angel, John Stagliano, declaró que "aunque nuestra compañía muestra escenas de sexo duro y agresivo, la naturaleza de estas acusaciones es tan contraria a los valores de nuestra compañía que hemos considerado necesario cancelar los rodajes con Deen hasta que tengamos más información". En los últimos días, estrellas porno, publicistas y directores han apoyado la decisión de Evil Angel y de otras compañías.

"La diferencia es el consentimiento. Creo que cualquier acto sexual está bien siempre y cuando sea una decisión acordada por dos adultos que acceden a ello", dice la estrella porno Alex Lynx, que ha actuado con Deen en diversas ocasiones. "Si no hay consentimiento de todas las partes implicadas, la cosa se pone seria. La salud y la seguridad de los demás no es algo que deba tomarse a la ligera jamás".

Para garantizar la seguridad de las mujeres, los miembros de la industria del porno discutirán lo que piensan unos actores de otros. La industria del porno es relativamente pequeña y la mayoría de los actores, directores y publicistas se conocen y tienen confianza entre ellos. "Aunque es un negocio millonario, la industria del porno es muy pequeña; es una comunidad cerrada", dice el veterano publicista del porno Mike Kulich. "Todo el mundo conoce a todo el mundo y las acusaciones contra Deen son impactantes".

Por supuesto, las empresas pornográficas también tienen un incentivo empresarial para echar a Deen. El público femenino conformaba una gran parte de lo que solía ser la devota audiencia de Deen, y muchas chicas han hablado del encanto del actor, de su aspecto entrañable y familiar, y que era parte de lo que lo hacía excitante. Las acusaciones de violación han destrozado la imagen de Deen, lo que podría provocar el rechazo del público hacia cualquier estudio que siga trabajando con él. "En la era de las redes sociales, el internet es juez, jurado y verdugo", explica Kulich. "En un negocio que se basa en el consentimiento, no hay lugar para alguien que no respeta los límites de los demás. Incluso aunque todavía no se le haya declarado culpable, lo más importante es que las mujeres estén cómodas en el set".

Cortar relaciones con Deen es necesario, pero no deja de ser desagradable. Además de ser un negocio, muchos actores porno veteranos describen la industria como una "familia". Según Lynx, "en esta familia, hay cero tolerancia en poner en peligro a los demás". Pero ningún divorcio es agradable. "Me han entristecido mucho estas historias", dice Reign. "Nunca he visto ningún comportamiento que se corresponda con estas acusaciones, pero me considero feminista y creo en los derechos de los trabajadores sexuales. Si una mujer dice que ha sido agredida, esa es una afirmación muy seria". Reign iba a actuar en un video promocional con Deen esta semana, pero ayer se negó a volver a trabajar con él.

"Creo que todo el mundo en nuestra industria se toma muy en serio los derechos y el consentimiento de los trabajadores sexuales", afirma Reign. "En nuestra industria es muy importante la decisión y el consentimiento de la mujer. Eso es lo que sustenta todo lo que hacemos. Es como un precepto que nos libera para hacer cualquier cosa frente a la cámara. Si pasa algo como esto, la comunidad no tarda ni un segundo en poner a alguien en la lista negra y dejar de trabajar con cierto tipo de personas".