Este artículo se publicó originalmente en VICE Italia.Tener un mejor amigo es lo mejor. Vale, sí, tienes familiares, pero a veces pueden ser insoportables. Los mejores amigos son geniales para todo: para pillar un pedal entre semana o simplemente para evitar el frío y la oscuridad.A diferencia de tu familia, a tu mejor amigo lo escoges —u os encontráis uno a otro—, pero eso no significa que esta persona que conoces mejor que a cualquier otra en el mundo no sea capaz de volverte loco a veces. Hacer frente a la peor faceta de tu mejor amigo puede provocarte una clase muy particular de ira, un sentimiento que con frecuencia viene acompañado de amor incondicional. Hablamos con algunas personas cercanas para preguntarles qué cosas de sus amigos odian en secreto. Pero estas historias no tratan de nosotros. O eso creemos.
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"Su saliva me da náuseas"
Cuando tenía 13 años y hacía pocas semanas que lo conocía, noté que mientras me intentaba explicar cómo crear un mazo invencible de Magic, se le escurrió una gota de saliva por la comisura de la boca. Incluso mientras escribo esto, se me revuelve el estómago cuando lo recuerdo.Esa gota de saliva también estaba ahí cuando se dio cuenta de que quería dejar a su novia un año después de que se fueran a vivir juntos, estaba ahí cuando sus padres decidieron no divorciarse y cuando me dijo que no pasaba nada por no saber qué quería hacer con mi vida. Siempre está ahí y siempre me da asco, pero nunca lo menciono. Siempre voy a estar ahí para mi mejor amigo, así como su horrible gota de saliva.G.Incluso mientras escribo esto, se me revuelve el estómago cuando lo recuerdo
"Me tocó ser Mel C. Yo odiaba a Mel C."
Cuando me siento sola o triste, siempre me promete que vendrá a casa a consolarme, pero se le olvida al rato
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Después de eso, ocurrieron muchos otros momentos Mel C. Cuando estamos juntas, todo es perfecto. Podemos pasarnos días hablando y lo compartimos todo. Los problemas vienen cuando no estamos juntas. Ella es de esa clase de personas que, en pleno 2016, se queda sin crédito en el móvil. No se presenta a las citas y se hace la muerta cuando intento contactar con ella. Cuando me siento sola o triste, siempre me promete que vendrá a casa a consolarme, pero se le olvida al rato.Se lo he dicho en varias ocasiones, pero ella no cree que sea tan grave y siempre acabamos reconciliándonos. Ella es la persona más serena y calmada que conozco. Quizá por eso a veces me saca de quicio. Aunque creo que esto tiene más que ver con mi ansiedad que con nuestra relación. He aprendido a detectar los momentos en los que no puedo confiar en ella y a bajar mis expectativas. Por ejemplo, con este artículo: se lo comenté hace una semana y le pregunté si quería participar. Parecía muy emocionada. La fecha de entrega fue hace cuatro días y aún no me ha mandado nada. Menos mal que yo también tenía una experiencia que contar.A.Mi mejor amigo es egocéntrico. Es el clásico snob capullo con el que nadie quiere hablar. Es como Matt Damon en Good Will Hunting, aunque menos musculoso. Pero llevamos mucho tiempo siendo amigos y es muy sincero conmigo, hasta el punto en que duele. No le molesta decirme que mi último artículo fue una mierda y que mi forma de vestir es "lo más ridículo que ha visto desde la época del postpunk". Yo también soy muy directo, pero hay algo que no puedo decirle: odio que sea tan egocéntrico y que me obligue a ser el que escucha y asiente con la cabeza todo el tiempo. Me encanta hablar con él, pero creo que sería sano cambiar de tema de vez en cuando.Vivimos a dos manzanas uno del otro. Cuando no estoy en su casa o él en la mía, nos vemos en un bar. Bebemos y hablamos sobre sus problemas, sobre la chica que lo decepcionó, sobre su psicólogo, sobre el libro que está leyendo o sobre su trabajo. A veces trato de sacar un nuevo tema a colación y me sigue la corriente durante un rato, pero siempre encuentra la forma de hacer que la conversación vuelva a girar en torno a él y a su vida. Es una habilidad increíble. No se lo puedo decir por dos razones: una, no quiero hacerle daño. Y dos: me encanta hablar con él.
"Es el clásico snob capullo"
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L.