La eutilona se vende como falso éxtasis pero nadie sabe lo que es

Hace apenas unas semanas el colectivo Energy Control alertaba de la presencia de una nueva sustancia llamada eutilona (bk-EBD) que estaba siendo vendida como MDMA. En concreto la encontraron en las pastillas Supreme distribuidas por Mallorca, pero no era la primera vez que daban con esta sustancia.

En otros países habían ya hallado la misma composición, pero nadie tiene claro cuáles son sus efectos para nuestra salud porque nadie hasta el momento los ha estudiado. La única información que se sabe sobre el tema y que nos han facilitado desde Energy es que pertenece a la familia de las catinonas, estimulantes sintéticos que a veces se hacen pasar por MDMA.

“Nos encontramos con sustancias cada vez más raras que solo se han probado en cerebros de ratones y luego esa droga luego pasa a venderse en la calle directamente sin saber lo que provoca, por lo que potencialmente es más peligrosa que cualquier droga conocida”, nos explica Fernando Caudevilla, médico experto en drogas de síntesis.

Caudevilla asegura que este tipo de sustancias son de verdad una ruleta rusa. “El problema es que se llevan tantos años diciendo que el que se fuma un porro se vuelve loco y el que el que se toma una pastilla se puede morir de un ataque al corazón, que son cosas que pasan con muy poca frecuencia, que cuando ahora hay que decir que estas sustancias son de verdad un peligro ahora nadie se cree a las autoridades”, nos dice.

Según nos dice Caudevilla, conocemos los riesgos de la cocaína, la heroína o la LSD, porque todos han sido fármacos. “Lo que ocurre con estas sustancias es que, cuando se ilegalizan, en una semana cambian dos moléculas y sale otra más rara. Este juego del gato y el ratón, porque la prohibición supone que la que saldrá será aún peor”, explica. “Las políticas de drogas no deberían causar más daños que los problemas que pretenden solucionar”, añade.

Existe ya un proyecto de orden para regular estas nuevas sustancias e incluirlas en las legislaciones nacionales vigentes, la mayoría de ellas cannabinoides sintéticos que han aparecido recientemente. Sin embargo, todavía no se ha publicado en el BOE, por lo tanto la reforma no está aún contemplada.

Se cree que la eutilona puede tener algo que ver con la efilona (bk-EBDP), que el año pasado se estaba vendiendo también como MDMA. El pasado marzo ésta sustancia (bk-EBDP) fue fiscalizada, y por lo tanto convertida en ilegal con efectos retroactivos.

Se conoce que la efilona, ésta sustancia que presumiblemente sería el precedente de la hallada actualmente, fue originariamente usada para propósitos forenses, hasta que en la década de los 2000 no se empezó a usar como sustancia alegal sustitutiva de la cocaína o las anfetaminas. Sin embargo la vinculación de una sustancia con la otra son solo conjeturas.

El doctor Emilio Mencias, experto en toxicología forense describe la eutilona como una catinona que presenta un mayor riesgo tóxico. De hecho hemos encontrado que en 2015 desde el Ministerio del Interior y Seguridad Pública del Gobierno de Chile, ya se había detectado la sustancia e incluida como elemento que puede producir efectos tóxicos o graves para la salud. Sin embargo en España no se había referenciado aún por aquel entonces.

Hasta la fecha sobre la eutilona tan solo existen algunos informes de personas que han sido usuarias. A diferencia de otras catinonas no afecta a la consciencia de inmediato sino que lo hace más lentamente. Los cambios en la visión son claramente perceptibles y el hormigueo descrito es notable pero no intenso. También se han descrito peores resacas, peor sabor y un efecto más parecido al de la cocaína.

Algunos de los efectos negativos provocados por su consumo que se han descrito son convulsiones, insomnio y ocasionalmente episodios de psicosis, pero no se sabe a ciencia cierta qué es lo que provoca la eutilona en nuestro organismo a largo plazo.

Lo que sí se sabe es que según Energy Control, la presencia de estas nuevas drogas como adulterantes de la MDMA ha disminuido en los últimos dos años. De hecho se ha observado que la concentración media encontrada de MDMA por pastilla ha aumentado más del 43% en cuatro años.

Dado a que la información sobre esta nueva sustancia que se ha encontrado es muy escasa desde Energy Control recomiendan evitar su consumo. En el caso de dudas respecto la procedencia y pureza de la droga la entidad ofrece un servicio de análisis para detectar de manera precisa múltiples sustancias así como asesoramiento sobre su consumo con el fin de reducir los riesgos.